En le bullicio de la guerra, entre espada y sangre, entre muerte y muerte aparente nació de la nada y de la desesperación el odio que haría furor cuando nadie tenia nada que hacer. Nada más por lo que vivir. Nada más por lo que morir. Ningún motivo por el que levantar el escudo cuando cae el látigo de la noche eterna, más que el odio ardiente de uno mismo hacia su persona, por no saber proteger lo que alguna vez algo llego a valer.
Entre los parpados moribundos que no saben abrir nace el recuerdo de un sueño. Una noche de calor, de estrellas en el cielo, de furor en el corazón, una noche tan irreal, tan antinatural, tan triste... los grillos están entonando su ultima canción, la luna se esconde de ellos, de los dos, de la pareja que una vez se amó hasta doler.
En el brillo de la espada de quien mas bajas lleva a sus espaldas brilla una mañana, una mañana de frio invierno, una mañana de manzanas frescas, pan con mantequilla y miel, huevos y puré... una mañana de llantos infantiles, de sonrisas cansadas, de planes matinales, una mañana llena de amor, de miradas que se cruzan, de paciencias hasta que le tiempo se haga presencia...
En el sufrimiento que hay bajo el oro y las joyas se vislumbra un atardecer de silenciosos sollozos, de negros ropajes...
En el bullicio de la guerra, entre espada y sangre, entre muerte y muerte aparente, nació de la nada y la desesperación el dolor.
martes, 25 de marzo de 2014
jueves, 20 de marzo de 2014
Primavera
La primavera, esos segundos que vive el alma en el cenit de su existencia, la plenitud de una sonrisa, el momento mas algido de la musica, la vida en si misma... Es la estacion que hace palidecer al invierno como un simple triste recuerdo, el silencio de la monotonia... Es la luz que hace brillar al sol,
Es el trasfondo del brillo de sus ojos
El reflejo de su pelo, la brisa
que se escapa entre tus dedos...
Simplemente, el silencio que
acompaña a tus besos.
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